En ésta nueva entrada utilizaré un ejemplo de la vida cotidiana para tratar de explicar de una manera más fácil que son los umbrales y los límites planetarios fijados por Johan Rockstrom, de los que habla mi entrada anterior.
Supongamos un futbolista de un equipo muy conocido que se encuentra en un buen momento de su carrera profesional: buen estado físico, fama, dinero…
Supongamos ahora, que tras sufrir un trágico accidente, se produce una lesión medular quedando dicho futbolista parapléjico, con lo cual es muy probable que no pueda volver a jugar al futbol.
Si trasladamos este ejemplo al caso de los límites planetarios podríamos decir que el futbolista pierde su capacidad de recuperación o “resiliencia” al cruzar un determinado umbral, (lesión de médula), cambiando a otro nuevo estado (paraplejía) , siendo muy difícil retornar al estado inicial. De igual modo puede ocurrir con el Planeta, por las múltiples presiones que el ser humano ejerce sobre él.
Espero que el ejemplo ( a pesar de ser trágico), haya sido ilustrativo y contribuya a entender mejor que son los límites planetarios.
¡Gracias a tod@s `por leer el blog!
Muy bueno Rosa!
ResponderEliminarEl ejemplo pone claramente de manifiesto el concepto de umbral, pero ... hay que reconocer que un pelín trágico es.
ResponderEliminarEn cualquier caso, buen trabajo, ya estais viendo que los umbrales son más frecuentes de lo que inicialmente pensamos.
Suelen decir que una imagen vale más que mil palabras... y este símil que utilizas lo corrobora. Es una idea realmente impactante: nuestro planeta, paraplejico. Pasa de ser fuente de recursos, de bienes (...de vida!) a, no sólo no seguir proporcionándolos, sino que se convierte en un sumidero de atenciones, de subsanaciones... todo con la intención de retornar a un estado mejor para el ser humano, el causante del daño...Impresionante..
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